Cambiaste su vida, le animaste a ser otra persona y lo llegó a ser.
Juntas cambiasteis el mundo, os hicisteis mayores.
Compartisteis debates, ideas, lágrimas.
Vivisteis momentos inolvidables, buenos y malos.
Luchasteis contra los villanos y en ocasiones ganasteis.
Bailasteis en fiestas, bebisteis.
Siempre te dejo ser tú y hacer lo que querías. Os dabais consejos.
Pero un día, vuestras vidas cambiaron, alguien a quien queríais se fue, hicisteis promesas que jamás pensasteis que no cumpliríais.
El lazo tan gordo, largo y fuerte que os unía se fue deshilachando poco a poco hasta quedar por la mitad.
Con el tiempo, el lazo seguía intáctil y siendo el pero no vosotras.
Dejasteis de ser quienes erais, tu sobreviviste, ella no, tu conseguiste salir de esa espiral negra y oscura que no para de ahogarte en un pozo sin fondo, ella se cayó y ahora intenta escalar para salir.
Dejaste de ser tu y por ello, ella perdió y murió, tu mejor adiós se lo dedicaste sin corazón, aquellas lagrimas únicas te las guardaste.
¿El motivo?, yo no lo se.
Lo que si se, es que te alejaste de su lado cuando mas te necesitaba.
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